Sistemas RTLS: la localización elevada al siguiente nivel

¿Qué es RTLS?

Los RTLS (Real-time Location Systems o sistemas de posicionamiento en tiempo real) son una interesante apuesta para optimizar la gestión del manejo y transporte de activos en múltiples entornos. En esencia, este tipo de sistemas permiten localizar de forma digital y en tiempo real los movimientos de elementos físicos en espacios cerrados amplios (sin caer, por tanto, en las obvias limitaciones de los sistemas de geoposicionamiento tradicionales).

Los RTLS hacen uso de las tecnologías de radiofrecuencia, así como de dispositivos inalámbricos como etiquetas de localización o teléfonos móviles. De esta manera, se obtienen datos de posición que permiten, entre otras cosas, obtener visualizaciones en directo de las ubicaciones de los objetos en un mapa interior, así como su integración en flujos de trabajo y en sistemas automatizados, o bien en soluciones de gestión de activos y de cadena de suministros.

Las funciones del RTLS, más allá del GPS

Se estima que la tecnología GPS ha generado más de 1.4 billones de dólares para la industria del sector privado en EE.UU. desde que se hizo accesible en los años 80. RTLS, por su parte, busca desbloquear para el interior el mismo valor de localización que la tecnología GPS ha creado para el mundo exterior. Su uso es fundamental para la industria 4.0, el IoT, la innovación en sectores como la sanidad, la fabricación o los almacenes, el aumento de la eficiencia, la transformación de las operaciones físicas mediante la mejora de la seguridad y el impulso de los resultados empresariales.

Los RTLS pueden utilizarse para cumplir diversas funciones, especialmente obtener la localización de activos o personas con diferentes ámbitos como industria, transporte, control de inventario, logística, seguimiento de materiales, seguridad del personal, navegación en interiores, ubicación de equipajes, análisis deportivo, o monitorizar a personas desaparecidas.

¿Cómo funciona el RTLS?

El funcionamiento concreto de los RTLS puede ser variable, pero todos tienen en común disponer de una red de componentes hardware y software conectados, los cuales rastrean la ubicación de personas y objetos dentro de un área definida. Los RTLS se basan principalmente en tecnologías de radiofrecuencia que permiten la comunicación inalámbrica entre un grupo de dispositivos transmisores, receptores o transmisores-receptores.

El dispositivo transmisor envía transmisiones de datos codificados por radiofrecuencia o “parpadeos” de localización a un intervalo continuo. Los receptores están desplegados en lugares fijos y reciben y leen las señales que ha emitido el dispositivo transmisor. Posteriormente, los datos de localización se envían a un software motor de localización para calcular la posición del objeto o persona. Una vez que el software ha recibido los datos, existen diferentes técnicas para determinar su situación con mayor o menor exactitud (podemos mencionar a las basadas en el tiempo de vuelo de la señal - TWR o TDoA - , en el ángulo con el que se recibe la señal - AoA - o en intensidad de señal, o RSSI).

Los componentes de un RTLS pueden variar dependiendo los requerimientos de la aplicación como precisión, latencia, alcance o complejidad de despliegue. La mayoría de RTLS comparten diversos dispositivos, entre los cuales podemos distinguir a las anclas (desplegados en posiciones fijas que detectan, localizan y leen las señales transmitidas por los equipos transmisores para intercambiarlas con el motor de localización que calculará la ubicación exacta), las etiquetas o tags (que, adosadas a personas, activos u objetos, sirven para delimitar su ubicación enviando señales a las anclas), sensores IoT (que proporcionan datos para enriquecer a la inteligencia del sistema), gateways RTLS y, particularmente, los motores de localización y la plataforma de gestión, que convierten toda esta avalancha de datos en inteligencia de situación de los activos y en herramientas para sugerir la optimización de su situación o de su transferencia de unos lugares a otros de la fábrica, el centro comercial, el hospital o el almacén.

La importancia de la precisión en RTLS

Teniendo en cuenta que hablamos de sistemas cuya combinación de tecnologías permiten lograr precisiones de localización de hasta 20 cm en el caso de la UWB (Ultra Wide Band), su aplicación está especialmente indicada para entornos especialmente tensionados en cuanto a su exigencia de optimización en los caminos de activos diversos, y particularmente en infraestructuras cuya disposición o construcción (como el obvio caso de una fábrica) haga imposible o demasiado poco precisa la geolocalización por los medios tradicionales.

Por seguir con el ejemplo de la industria, podemos mencionar la localización de activos críticos y personas en planta, la optimización de flujos de trabajo - incluyendo el análisis de movimientos y tiempos de transición y picking -, el cálculo de distancias y la emisión de alertas (por ejemplo, sobre accesos a zonas restringidas), la información PRL en tiempo real, o los servicios de integración con soluciones AGV (Autonomous Guided Vehicle), entre muchos otros usos.

Pero la utilidad de los RTLS no queda en el mundo de la industria; de hecho, se puede decir una de las aplicaciones más dinámicas de este tipo de tecnologías va a tener como protagonista al sector de la salud, especialmente en lo tocante a la optimización de los espacios de atención sanitaria (por ejemplo, la disposición de servicios de urgencias hospitalarias mediante el análisis de patrones de movimiento y concentración de pacientes), o al control de activos valiosos, escasos y de rápida exigencia (mobiliario clínico o equipamiento quirúrgico). Ahí donde sea importante la precisión, la rapidez de reacción y la disponibilidad de herramientas de análisis de datos para optimizar el movimiento de activos, los RTLS son una clara apuesta de futuro.